A estas alturas del año, no nos vais a negar que estáis que os subís por las paredes después de este largo invierno que hemos tenido y estamos seguros que en vuestra mente estáis contando los días para que llegue esa ansiada escapada de camping . ¡Nosotros tenemos un deseo irrefrenable de salir de camping, dejarnos llevar por la llamada de la naturaleza y disfrutar de las maravillosas sensaciones que sólo ocurren en los campings!.
Parece que poco a poco las lluvias que han bañado la Península Ibérica estas últimas semanas se retirarán para dar paso al verano. Lo cierto es que la primavera nos ha dejado un montón de agua, un color verde intenso, lagos de un azul turquesa precioso, deshielo en zonas de montaña, … en fin… que es hora de salir y dejarnos llevar, aventurarnos en lo desconocido, sentirnos libres, vivos y dormir, comer, bañarnos en plena naturaleza, en un camping .
¿Alguna vez habéis sentido la llamada de la naturaleza? Esto ocurre cuando una persona siente la necesidad de romper con la rutina diaria, descansar en el trabajo y lo único que necesita es desconectar el teléfono y simplemente dejarse llevar. Puedes subir una montaña, pasear a la orilla del mar, sentarte en un parque a leer un libro o pasar un día disfrutando del sonido del agua de un río. Esto ocurre cuando nuestro cuerpo pide desconexión y bien seguro muchos sabéis de lo que estoy hablando. Elegir un camping para salir de la rutina es un acierto seguro ya que casi todas las tareas cotidianas las podéis hacer al aire libre, comer, cenar, dormir, daros una ducha y además os permite disfrutar de los momentos que nos regala la naturaleza cada día y que la mayoría de las ocasiones nos perdemos por falta de tiempo, instantes como el amanecer, el atardecer, las estrellas, los sonidos de la naturaleza… ¡¡¡Sólo pensarlo, ya suena relajante!!!.
¿Y las sensaciones que produce el viajar? Todo empieza como un reto, el sueño de disfrutar de una nueva aventura, explorar un lugar desconocido, … durante el viaje disfrutaréis de vivencias diferentes y nuevas, además, es bien probable que tras un viaje aventurero algo cambie en vosotros, romperéis con los límites, aprenderéis mucho del lugar, de la cultura de sus gentes… ¿Y a la vuelta? Soñaréis con que llegue la siguiente escapada por que los llevamos dentro el famoso gen Wanderlust, somos unos viajeros, soñadores y tenemos esa necesidad irrefrenable de viajar.
